En la sede de nuestro Club tuvo lugar este pasado 28 de Febrero el segundo encuentro de ajedrez padres e hijos, donde la competición es doble: una como familia verdadera y otra como familia formada por el azar. Así yo tenía dos hijos y mi hijo dos padres. Al final ni con el propio, ni con el prestado alcancé premio alguno, lo cual indica quién era el menos experto de la pareja.
Partidas de diez minutos, que dieron sorpresas por el tiempo, como aquel experimentado jugador que fue incapaz de dar mate con dama, rey (y más piezas) contra rey, y se le cayó la bandera, o aquel otro que con dama y dos torres acabó ahogando a su adversario que solo contaba con el rey. Son cosas a las que lleva el atrevimiento de enfrentarse al toro en el ruedo y no desde la barrera como siempre hacemos los padres.
Fueron 6 rondas entre risas constantes, como aquel que dio el resultado antes de comenzar la partida, o aquellos que comenzaron con el rey y la dama cambiados de lugar.
En cuanto a ganadores, no hubo sorpresas pero sí que algunos guiños de complicidad entre los padres e hijos eventuales al recoger los premios.
Al acabar, se hincó el diente a un delicioso jamón que nos dio la bienvenida y junto a unas cervezas y refrescos para los menores, con los que acabamos de pasar una tarde estupenda. Al no contar con el cortador oficial del torneo del año pasado, hubo que recurrir a la fuerza bruta para acabar con la pieza que se resistía.
Muchas gracias al Club y al Ayto de Vicar por su apoyo en la convocatoria de este torneo.
Partidas de diez minutos, que dieron sorpresas por el tiempo, como aquel experimentado jugador que fue incapaz de dar mate con dama, rey (y más piezas) contra rey, y se le cayó la bandera, o aquel otro que con dama y dos torres acabó ahogando a su adversario que solo contaba con el rey. Son cosas a las que lleva el atrevimiento de enfrentarse al toro en el ruedo y no desde la barrera como siempre hacemos los padres.
Fueron 6 rondas entre risas constantes, como aquel que dio el resultado antes de comenzar la partida, o aquellos que comenzaron con el rey y la dama cambiados de lugar.
En cuanto a ganadores, no hubo sorpresas pero sí que algunos guiños de complicidad entre los padres e hijos eventuales al recoger los premios.
Al acabar, se hincó el diente a un delicioso jamón que nos dio la bienvenida y junto a unas cervezas y refrescos para los menores, con los que acabamos de pasar una tarde estupenda. Al no contar con el cortador oficial del torneo del año pasado, hubo que recurrir a la fuerza bruta para acabar con la pieza que se resistía.
Muchas gracias al Club y al Ayto de Vicar por su apoyo en la convocatoria de este torneo.
Mi granito de arena al destrozo ajedrecístico.
ResponderEliminarTe dan jaque con dama, atacan rey y dama: ¡¡jugada maestra!! retiras el rey de la dama quedando ésta desprotegida.
2 minutos, 4 peones, torre y dama contra rey mate cuando quedan 3 segundos y gracias.
Ganar alguna partida estando varios movimientos en jaque.
Algunos nos salimos, no se si las cervezas se bebieron antes o después.